Cuando empecé mi andadura por el mundo online, tuve que ir aprendiendo (sigo haciéndolo a diario) en función de lo que necesitaba.
De esto hace más de seis años.
Comencé por un blog, luego con un ecommerce de productos físicos, venta de productos digitales, servicios de marketing….
Todos ellos, tienen algo en común: el email marketing.
Desde que comencé he utilizado varias herramientas: Mailchimp, Benchmark, GetResponse, incluso Active Campaign.
Todas ellas con sus particularidades y con su punto en común, a más suscriptores más cara la herramienta.
Sin embargo, hay algo que siempre me ha obsesionado. La dependencia.
Pues a medida que dependes de más cosas, más débil eres.
Hablo de una debilidad contraproducente. Y aplicado a los negocios, algo está claro.
A mayor dependencia, más débil será tu negocio.